Muy buenas, hoy os voy a hablar de la figura de un personaje que
prolifera en los clubes, a muchos os sonará.
Los gerentes de mis clubes no me dejan, pero me encantaría
poner un cartel que rezase: “Para regañar a un compañero hay que haber ganado, por lo menos, el torneo del portal de tu casa” y otro que diga: "Para que tú juegues un partido con gente mejor que tú hay otro que tiene que jugar un
partido con gente peor que él".
Desde hace unos años, cuando llamas del club a alguien para facilitarle la labor de montar un partido, siempre viene la
siguiente pregunta: "¿Con quién jugamos?", y cuando considera que el partido
que le has montado no es de su nivel el muy osado te dice sin ningún tipo de
rubor: "A mi móntame partidos con gente mejor que yo que no quiero perder el
tiempo". Lo que no se para a pensar es que si juega con gente mejor, aplicando su
propio criterio, los demás estarían perdiendo su tiempo pero mientras no sea el
suyo parece que es menos importante. Es un virus que prolifera en los clubes y
ataca en su totalidad a la población masculina.
Creo sinceramente que si juegas partidos de mejor nivel que
el tuyo progresas más , pero también es importante saber jugar otro tipo de
partidos en los que tú tienes mayor responsabilidad y protagonismo y depende
mucho de la actitud que tengas en ellos.
Personalmente, yo juego todos los partidos dando lo máximo o
haciendo que los demás se diviertan. Como digo, si te esfuerzas en todos los partidos la
recompensa es la misma, incluso a veces soy capaz de experimentar una
sensación magnífica que es la de ayudar a alguien durante el partido.
En cuanto a lo de regañar en una pista me hace mucha gracia
simplemente por el hecho de que por creerte mejor que tu compañero puedas decirle lo
que tiene que hacer y a veces enfadarte hasta extremos de no querer volver a jugar más
con él. Personas que no tienen mucha idea de este deporte dando lecciones de lo
que hay que hacer y lo que no, hasta dónde hemos llegado. Propongo que para poder tener ese privilegio tengas que
hacer un curso de formación de “regañador oficial” y así todo queda regulado.
En serio, tenemos que sacar lo mejor de nosotros y de
nuestro compañero pero también me gustaría incidir en la otra parte, ese
jugador que tiene la suerte de jugar con un compañero mejor que él. Podemos
ofrecerle al otro nuestro sacrificio, atención y esfuerzo, en resumidas
cuentas GANAS y desde luego no jugarnos nosotros las bolas sino ser lo más
sólidos posibles evitando riesgos, ya que lógicamente vamos a fallar más bolas
que nuestro compañero que es mejor que nosotros.
Todos los Lunes en nuestro club de PAMPLONA congregamos
a unos entusiastas en cuatro o cinco
pistas donde jugamos todos contra todos y de momento no tenemos ninguno
contagiado por este virus, cada vez somos más y lo mejor de todo es el tercer
tiempo con las cervezas que nos tomamos después aunque alguna vez casi nos dan
las doce de la noche.
Un abrazo a todos
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